- Las subas se implementarán desde el martes.
- Sigue creciendo la brecha entre los colectivos porteños y los nacionales.
Los colectivos y el subte porteños volverán a aumentar desde el martes. También los peajes de las autopistas de la Ciudad. Así lo dispuso el Gobierno el mes pasado, por lo que se aplicará un incremento total del 4,4% en cada caso (surge del 2% de actualización mensual, más el 2,4% de la inflación de febrero).
Nuevos valores de los boletos
A partir del 1° de abril, los valores de los boletos variarán según la distancia del viaje. A continuación, se detallan los nuevos precios para las líneas numeradas del 200 en adelante:
- Boleto mínimo (de 0 a 3 kilómetros) con tarjeta SUBE registrada: de $ 408,24 a $ 425,57.
- De 3 a 6 km: $ 474,09
- De 6 a 12 km: $ 510,61
- De 12 a 27 km: $ 547,17
- Tarjeta SUBE sin nominalizar: de $ 676,66 hasta $ 927,72
Además, la tarifa social, que beneficia a jubilados, pensionados y otros grupos que perciben ayuda de ANSeS, mantendrá su descuento del 55%. De este modo, el boleto mínimo para estos beneficiarios será de $ 191,51.
Según el Gobierno provincial, el incremento de las tarifas busca garantizar la “continuidad y regularidad de los servicios provinciales” y mejorar la “calidad y las condiciones en la prestación de los mismos”. Estas medidas se toman en un contexto de alta inflación y crecimiento de los costos operativos del transporte público.
Nuevos métodos de pago para colectivos
A partir del jueves 27 de marzo, también se habilitaron nuevas formas de pago para los viajes en colectivo. Además de la tradicional tarjeta SUBE, los pasajeros podrán abonar sus pasajes con tarjetas de débito, crédito y prepagas contactless de Visa y Mastercard de todos los bancos. También se podrán utilizar billeteras virtuales y relojes inteligentes, facilitando aún más el acceso al transporte público.
Estas nuevas formas de pago ya se encuentran disponibles en varias ciudades. En Buenos Aires, se habilitaron las líneas 4, 12, 34, 39, 61, 62 y 68, así como la línea 1 que recorre el AMBA. Además, el sistema de pago fue implementado en ciudades como Mendoza (colectivos y metrotranvías), Rafaela (Santa Fe) y Río Cuarto (Córdoba), como parte de un plan de modernización del transporte público.
Las líneas 4, 6, 7, 12, 23, 25, 26, 34, 39, 42, 44, 47, 50, 61, 62, 64, 65, 68, 76, 84, 90, 99, 102, 106, 107, 108, 109, 115, 118, 132 y 151, que tienen recorridos que comienzan y terminan dentro de la Ciudad, tendrán un boleto mínimo de $ 426,21, mientras que en los de jurisdicción nacional, que son aquellos con trayectos entre Capital y el GBA, el mínimo sigue en $ 371,13.
Desde la Ciudad insisten en que se busca recomponer el atraso de la tarifa teniendo en cuenta que «actualmente cubre el 70% de los subsidios».
Aunque se esperaban subas en la misma sintonía de parte de Nación, y pese a que hay una resolución del año pasado que estipula que el boleto de colectivo debe actualizarse en forma bimestral según el IPC, el último ajuste se hizo en agosto del año pasado, cuando se llevó el boleto mínimo al valor actual. Pero no hubo más aumentos, en parte debido a que el costo del transporte tiene impacto directo sobre el índice de inflación, uno de los factores que el Gobierno muestra como logros de gestión.
La brecha, entonces, crecerá ahora una vez más. Por ahora, Nación no dio señales ni mostró intenciones de aplicar aumentos. Y habrá que esperar qué puede pasar en un año electoral, en el que claramente subir las tarifas de los servicios públicos no es una buena medida para cosechar votos. Y menos en suelo porteño, donde La Libertad Avanza no esconde su intención de sumar poder y espacios actualmente en manos del PRO.
En la Ciudad utilizan como argumento para sostener el aumento de los colectivos en que llega acompañado de una serie de medidas destinadas a mejorar el servicio de las 31 líneas locales, cuyo control asumió el año pasado y que tienen un costo operativo, en materia de subsidios, de unos 7.500 millones de pesos mensuales.
Uno de los cambios estará en los recorridos, que están en estudio y podrían sufrir modificaciones temporales o permanentes. Además, según las fuentes porteñas, también están bajo análisis las combinaciones con otras opciones de movilidad que también controla el Ejecutivo porteño, como el subterráneo y el sistema de bicicletas públicas. Y ya hay 8 líneas en las que se puede pagar con tarjeta de crédito y débito, desde la semana pasada.
Además, desde el 1° de enero, las unidades que estan en la calle no pueden superar los 10 años de antigüedad. La antigüedad promedio de la flota actual es de 6,5 años. Y el objetivo es bajarla a 4,5. Entre las 31 líneas hay 1.691 colectivos.
Subte
El subte también aumenta este martes: pasará de $ 832 a $ 869. Aquí, la brecha con el colectivo se agranda más del 100%. Pero en parte se viene atenuando desde que funciona el sistema multipago, ya que las tarjetas de crédito ofrecen descuentos del 65% y, en el caso de quienes paguen con débito de los bancos Nación, los reintegros llegan hasta el 100%. Pero son promociones por tiempo limitado, aunque se vienen prorrogando.
Según información oficial, la Ciudad destina anualmente USD 390 millones para el funcionamiento del sistema de transporte público (USD 170 millones en colectivos y USD 220 millones para el subte).
De acuerdo con las mismas fuentes, «la cobertura a través de ingresos tarifarios representó, a diciembre 2024, el 23,7% de los costos. Es decir que se subsidia el 76,3%, mientras que históricamente osciló entre el 35 y el 40%».
Como argumento para sostener el aumento, también agregaron que «los costos aumentaron un 84,85% desde el último cálculo en diciembre 2023 hasta septiembre 2024″.
Fuente:
Clarín
GCBA