La noche en que concluyó el Mundial de Rusia 2018 y Francia se coronó campeón, un grupo de aficionados aprovechó los festejos para cometer actos vandálicos.
Por ejemplo, en la ciudad de Grenoble, en el país galo, unos 300 sujetos, algunos con sus caras cubiertas con camisetas o capuchas, quemaron más de una decena de vehículos, causaron daños materiales a dos negocios locales y derribaron varios objetos de estaciones del transporte público.
Además, en redes sociales se difundió un video que muestra el momento en el que un grupo de jóvenes robó de un autobús en movimiento las maletas que había en su interior.