Lo dispuso la Municipalidad de Córdoba para promover el distanciamiento físico entre pasajeros.
Por la pandemia del coronavirus, la Municipalidad de Córdoba anunció que era obligatorio trasladar pasajeros «únicamente sentados en las unidades del transporte urbano». A través de este medio, llegaron algunos reclamos de los usuarios manifestando que no se estaba cumpliendo la normativa.
Ante esta situación y, considerando que el transporte público es «un foco de contagio potencial importante del coronavirus», el intendente Martín Llaryora ordenó la reducción del uso de asientos en los colectivos para garantizar el distanciamiento físico.
De esta forma, crearon un nuevo esquema que deberán respetar todas las unidades de las empresas prestararias de este servicio:
1. El conductor de la unidad deberá encontrarse distante del pasaje.
2. Las ventanillas del vehículo deberán estar abiertas durante todo el recorrido.
3. El uso del tapaboca es obligatorio para el chofer y los pasajeros.
4. Queda expresamente prohibido que personas viajen paradas.
Estas medidas regirán mientras continúe el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Fueron dispuestas por Llaryora luego de que visitara la empresa Tamse y supervisara la disponibilidad de los asientos habilitados.
Como el Gobierno Nacional habilitó nuevas actividades en esta cuarentena administrada, desde el Palacio 6 de Julio recordaron que aquellas personas que se movilizan en auto o en moto podrán estacionar las 24 horas de manera libre y gratuita en los sectores pertenecientes al servicio de Estacionamiento Medido Municipal.
«Los autos particulares pueden estacionar en los sectores donde el cordón está pintado de amarillo, no así en el rojo, manteniéndose las prohibiciones de estacionar sobre ingresos de cocheras, paradas de transporte público y espacios para emergencia», agregaron en el comunicado.