Así lo estableció un relevamiento del Observatorio Social del Transporte. Lo atribuyen a bajas frecuencias y al nivel de caos vehicular.
Lejos de atenuarse, la polémica en torno a las frecuencias del transporte urbano de pasajeros se agudizó en las últimas horas. A las críticas del PJ por el tiempo que deben esperar los usuarios para tomar un colectivo, hasta 15 minutos durante el día, y la respuesta del oficialismo que negó esos plazos, ahora se sumó una comparación. Según el Observatorio Social del Transporte, en algunas zonas de Rosario ya se viaja más rápido en bicicleta que en ómnibus.
Así lo planteó uno de los referentes del Observatorio, Carlos Fernández Priotti, quien vinculó la situación a «las bajas frecuencias de la mayoría de las líneas y el nivel de congestionamiento vehicular que hay en las calles de la ciudad».
Por eso, según Priotti, «en las calles donde hay bicisendas y el flujo es ágil, la velocidad a la que van los ciclistas termina siendo mayor a la que viajan los usuarios del transporte en muchas líneas urbanas».
Para el especialista en transporte, la clave pasa por sumar más unidades al sistema público «para que sea atractivo para muchos rosarinos que usan su auto particular» y generan inconvenientes en el tránsito.
En ese sentido, el relevamiento del Observatorio Social del Transporte, cuyas conclusiones difundió esta semana el concejal Eduardo Toniolli (PJ), detectó que la frecuencia promedio de los colectivos en Rosario, en horario diurno, es de casi 15 minutos.
«Es un plazo amplio, más teniendo en cuenta que las autoridades del Ente de la Movilidad difundieron días atrás que debían ser de sólo 10 minutos», resaltó Priotti.
Según el especialista, «la falta de unidades hace disminuir las frecuencias y, sumado al grado de congestionamiento vial, se ha notado que en algunas zonas de Rosario se va más rápido en bicicleta que en colectivo».
Al respecto, el estudio de campo efectuado a fines de julio detectó que la velocidad de los ciclistas era de unos 15 kilómetros por hora, y en los colectivos «se estaba por debajo de esos valores», precisó Priotti.
A criterio del referente del Observatorio, «esto ha generado que el sistema de transporte público haya expulsado muchos pasajeros en el último tiempo y sólo queden quienes son beneficiarios de franquicias o bien no tienen otra alternativa de movilidad».
Réplica. Los datos difundidos por Toniolli fueron replicados por el concejal del Frente Progresista Carlos Comi, quien tildó al estudio de «tendencioso» y «fuera de contexto».
«Evidentemente se trata de un trabajo con conclusiones tendenciosas que pretenden poner en relieve deficiencias en el sistema de transporte público de pasajeros, sacando de contexto datos oficiales», sostuvo.
«Se mezclan servicios de manera arbitraria, sin tener en cuenta que el sistema de transporte urbano dispone de diferentes líneas y prestaciones y que cada una de ellas obedece a una lógica particular, considerando distintos factores; como ser la cantidad de servicios que pasan por el mismo lugar; la demanda de los mismos; los servicios asociados a factores particulares propios a cada barrio, que en algunos casos se adaptan a requerimientos o pedidos de vecinales», agregó el edil del ARI.
Fuente: