Un autobús de dos pisos propulsado por hidrógeno donde los coches pueden cargarse en el techo y viajar en un entorno totalmente cómodo, similar al de un tren de clase ejecutiva.
Este es el proyecto, sin duda poco convencional, de una start-up francesa con sede en Dijon, llamada Symone. Por ahora, la idea solo se ilustra a través de una serie de imágenes publicadas en el sitio web oficial de la startup (de donde provienen las imágenes de esta página). ¿El gol declarado? Reducir el tráfico en las autopistas francesas.
El autobús que transporta coches, de 00
La start-up está trabajando en un autobús con capacidad para cuatro o cinco coches en el techo, mientras que los propietarios y pasajeros pueden disfrutar del viaje en asientos de clase ejecutiva dentro del vehículo, llegando a su destino con comodidad. ¿Número de asientos a bordo? 18 (con la consiguiente compensación desafiante en los costos operativos…).
¿El resultado? Las representaciones muestran un vehículo extraño que combina un autocar de lujo y un remolque de dos pisos.
Los fondos disponibles para el desarrollo consisten en 110.000 euros de fondos públicos, más 240.000 euros captados de fondos privados. La start-up tiene como objetivo exhibir el primer vehículo en 2024 y registrar un centenar de ellos para 2030.
Symone tiene experiencia en el transporte colectivo de vehículos con un servicio que permite a los motociclistas llegar a un lugar de vacaciones de motociclistas en tren o avión mientras su motocicleta es entregada allí por remolques especiales para motocicletas.
«Nuestro objetivo es tener un vehículo de demostración para 2024 y mostrarlo en los Juegos Olímpicos de París», dijo el jefe y cofundador de Symone, Romain Coispine , «que será un gran escaparate para innovaciones como la nuestra».
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