El hombre fue desvinculado de la empresa a la que pertenecía el micro de larga distancia que se accidentó en la Autovía 2 esta semana.
«Yo me negué a salir porque estaba cansado y me echaron«, sentenció Esteban Coriciano, ex chofer de la empresa Vía Bariloche, la misma que esta semana protagonizó un accidente en la Autovía 2 en el que murieron dos personas.
El chofer afirmó que los conductores «son rehenes» de la empresa ya que a la menor queja corren el peligro de ser despedidos.
«No dormimos, no nos pagan los feriados, trabajamos sin franco«, enumeró Coriciano, cuyo relato alcanzó un nuevo nivel de dramatismo a la luz del vuelco ocurrido esta semana cuando el chofer al volante, Walter Falcón, se quedó dormido y estrelló el vehículo contra el cantero central a la altura de Samborombon.
«Se durmió, lo dejé dormir dos o tres horas, y después lo desperté para que maneje 100 km y se durmió cumpa, se durmió. Se despistó en una curva y caímos a un zanjón», había dicho el chofer Ernesto Dutto, que viajaba junto con Falcón, en un audio que se viralizó.
Dutto le envió una serie de mensajes a un contacto cuando ya estaba en la comisaría tras el accidente y reconoció que su compañero y él «rebotaron» al llegar a destino en el viaje anterior, lo que significa que apenas llegaron a Mar del Plata salieron a la ruta de nuevo para ir a General Pacheco con 38 pasajeros a bordo.